Seguimos pensando que la acción y la movilización son imprescindibles para empezar a cambiar la situación actual, que se está haciendo absolutamente insostenible y sin ningún atisbo de mejora, sino todo lo contrario: cada vez estamos peor.
Así no podemos seguir:
La pobreza la tenemos aquí mismo: nuestros vecinos, amigos y familiares se están quedando sin trabajo.
Los que aún lo conservan, mileuristas, hasta hace poco explotados y hoy, en cambio, ya son unos privilegiados. Reciben con alborozo un salario en el que solamente pueden administrar la escasez.
Ningún “representante” político, ni nacional, ni autonómico ni local ha hecho nunca nada por la gente a quien dice representar, puesto que solamente defienden los intereses de su casta y sus privilegios, sin importar lo más mínimo el partido en el que militan, que no son sino distintos collares del mismo perro. No podemos ser tan incautos como para pensar que va cambiar. Nunca ha cambiado. Siempre ha sido así.
Solamente podemos cambiar las cosas los directamente afectados, los perjudicados, la gente de la calle, de a pie, los que con el voto del 60% (y encima lo llaman democracia), y el dinero del 100% hemos justificado hasta ahora la existencia de estos parásitos. En nuestras manos está. Nadie lo va a hacer por nosotros. Pero no lo podemos hacer votando, eso es lo que quieren, así siempre ganan ellos. Tiene que ser de otra forma.
Desde este blog queremos dar un pequeño paso en este sentido. Una pequeña acción que sirva para conocernos, motivarnos y adquirir una confianza que nos permita seguir avanzando hacia otros objetivos un poco más ambiciosos, poco a poco pero sin pausa. Humildes pero constantes.
La única manera de avanzar es echar a andar, y eso es lo que pretendemos.
La acción concreta que queremos impulsar es la creación de un banco del tiempo: coordinar y unir nuestras fuerzas, habilidades y capacidades en un proyecto de colaboración y ayuda mutua en el que la única moneda de cambio sea el tiempo, sea cual sea el trabajo que se desarrolle.
Aunque existen otros proyectos similares, nuestra seña de identidad quiere ser que los participantes en el proyecto seamos un colectivo autogestionado, en el que el dinero pase a un segundo plano, y seamos capaces en el futuro de ampliar nuestras actividades en otros campos, que nosotros mismos, en asambleas, decidiremos.
Empezamos con el banco del tiempo puesto que es imprescindible ayudarnos entre nosotros, más en los tiempos que vivimos, pero solamente será un comienzo, el comienzo de un movimiento social nuevo en el que nosotros, los participantes, tomemos las decisiones. Si creemos en ello lograremos que funcione puesto que solamente depende de nosotros.
Quien quiera tomar parte en este proyecto puede contactar con CVG en la dirección de correo indicada. Pasado un tiempo suficiente, variable en función de las respuestas o aportaciones recoibidas, CVG se pondrá en contacto con todos los interesados, con el fin de ponerlo en marcha, entre todos, en la asamblea correspondiente. Las decisiones compartidas deben ser la base del proyecto.
Ánimo.
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